Reposa mar adentro, mirando el sol dorado. Su cuerpo se siente ligero, se mueve en sincronía con la inmensidad a su alrededor. El día está en calma, nada perturba su paz. Respira, cierra los ojos y se deja fluir con el mar.
Reposa mar adentro, mirando el sol dorado. Su cuerpo se siente ligero, se mueve en sincronía con la inmensidad a su alrededor. El día está en calma, nada perturba su paz. Respira, cierra los ojos y se deja fluir con el mar.